Colectivo GUIAS

El Colectivo GUIAS es una organización autoconvocada de la Facultad de Ciencias Naturales y Museo de la Universidad Nacional de La Plata. Nuestros objetivos fundantes son atender los reclamos realizados por los Pueblos Originarios, de no exhibición y restitución a sus comunidades, de todos los restos humanos que forman parte de “colecciones arqueológicas”, en especial los miles de restos humanos que se encuentran en el Museo de La Plata dependiente de la Facultad de Ciencias Naturales y Museo, de la UNLP. En pos de estos objetivos, desde el año 2006, trabajamos en la identificación de estos restos para su posterior restitución.

Para terminar con su cosificación como sujeto colonizado y sometido, lo integramos en el contexto histórico, identificándolo como sujeto social, definiendo el verdadero carácter de su lucha de resistencia y entendiendo ésta como un conflicto entre iguales.

Comprendiendo que la difusión es fundamental para la concreción de nuestros objetivos, hemos publicado y presentado cinco libros, desplegado muestras fotográficas itinerantes, dictado seminarios y conferencias en las Universidades Nacionales de Tucumán, Catamarca, Misiones, Rosario, Buenos Aires, La Plata, Comahue, Córdoba y Río Negro. Asimismo hemos participado en numerosas jornadas, nacionales e internacionales, organizadas por diversas instituciones gubernamentales, de Derechos Humanos, de formación docente, de trabajadores universitarios, foros sociales, centros culturales, entre otros.

Hemos logrado así, en más de una década de lucha, numerosas victorias y restituciones demostrando así, como nos enseñó Osvaldo Bayer, que: puede tardar mucho pero finalmente en la Historia triunfa la Ética.

Antropólogos denuncian prácticas colonialistas de ayer y de hoy.

Antropólogos denuncian prácticas colonialistas de ayer y de hoy.
Los prisioneros de la Ciencia: Inakayal y su mujer, su sobrina Margarita Foyel, Tafa, Maish, Calfukurá, Gherenal, Chipitruz, Seriot, Manuel Guerra, Polvareda, Pichón, María, Patria, entre muchos otros, expuestos en el Museo de La Plata.

"Prisioner@s de la Ciencia" en la Casa Rosada.

"Prisioner@s de la Ciencia" en la Casa Rosada.
Salón Pueblos Originarios (ex Salón Colón).

22 ago 2011

Presentación del libro "El Familiar: del ingenio La Esperanza al Museo de La Plata" en la Biblioteca de la Escuela Normal Abraham Lincoln - Lincoln - Bs As.

En el marco de la serie de eventos con motivo del cincuentenario del ISFD y/o T Nº 134, el día miércoles 31 de agosto a las 20:00hs, se realizará, en la biblioteca de la escuela Normal Abraham Lincoln, una conferencia a cargo de integrantes del colectivo GUIAS, en la cual presentarán el libro testimonial “EL FAMILIAR: del ingenio La Esperanza al museo de La Plata”, un documento que cuenta la recuperación fotográfica que contextualiza la apropiación de cuerpos pertenecientes a integrantes de la comunidad Wichi, por parte de científicos y autoridades del Museo de La Plata. “No serán los mismos ojos inescrupulosos del pasado los que observen los rostros de este libro. Cada uno del os jóvenes que recorran estas páginas los cubrirá con una mirada reparadora” (Kriscautzky - 2007)
La acumulación del conocimiento resulta inseparable de los valores éticos, condición que va de la mano de la necesidad de justicia y de la reparación histórica.

17 ago 2011

Prólogo de "Antropología del Genocidio. Identificación y restitución: 'colecciones' de restos humanos en el Museo de La Plata."

La identificación y restitución de los restos humanos que conforman las colecciones del Museo de la Plata ha sido, entre otras cosas, uno de los procesos de reflexión más significativos dentro de las Ciencias Antropológicas en los últimos años en Argentina. El Grupo Universitario de Investigación en Antropología Social ha tenido una importante y fundamental participación dentro del mismo. No obstante, lo que su obra, resultado del compromiso y dedicación de sus integrantes, ha abierto no es solo una discusión académica dentro de una institución universitaria en particular, se trata de un proceso de reflexión que debería cruzar a todos los miembros de esta sociedad. Existen preguntas con respuestas asumidas colectivamente. ¿Para qué un museo? ¿Por qué una sociedad debe determinar y conservar aquello que considera como "patrimoniable"? ¿De qué forma y quiénes son los que pueden determinan esto? El museo en sí mismo es algo asumido colectivamente, al punto que no se le cuestiona sino su tipo de organización, su infraestructura, sus comodidades para el visitante. Pero su existencia, el valor de aquello que "preserva" y la voz experta que ha determinado aquello que debe mostrarse y decirse parecen siempre estar por fuera de cualquier debate o pregunta. En tanto ciudadanos, el llamado "patrimonio" (histórico, antropológico o arquitectónico) se nos presenta como la parte visible y material de la identidad de la comunidad histórica en la que vivimos. Identidad y patrimonio semejan cristalizaciones sacralizadas que como tales deben ser protegidas del mismo contacto de los días, a lo largo del tiempo. Precisamente porque devienen en cristales detrás de cristales dejan de ser vistos como relaciones sociales, en las cuales intervienen agencias presentes y pasadas. Dejamos de ver la violación para contemplar al cuerpo violado y consagrarlo como "parte de una colección". Si el visitante del museo ha podido abstraerse del genocidio –las relaciones sociales implicadas en la formación de la colección antropológica- ha sido a través del aparato intelectual que construyó la idea del museo, al museo mismo, al rol social atribuido a sus creadores y rotuló personas como piezas de una colección. Desde el discurso político se fijaron narrativas de progreso y extinción que, de ser un programa de clase, devinieron en un discurso erudito, precisamente aquella voz académica autorizada que determinaría patrimonios y sus formas de preservación.En abril de 2010 el grupo GUIAS expuso su muestra fotográfica "Prisioneros de la ciencia" en el Museo Francisco Moreno de la ciudad de Bariloche. Durante un mes, la gente se sintió incómoda, confundida, perpleja, estafada, indignada de acuerdo a como lo expresaron muchos en el diario de visitantes de la muestra general denominada Wingka Malón. Muchos otros no entraron a ver la muestra, algunos indignados por el cuestionamiento a los próceres de la ciencia pero gran parte por considerar no poder soportar ver y recordar tanto dolor. La discusión sobre la muestra puso de relieve que no solo es posible, sino que es necesario como sociedad asumir una mirada crítica sobre las relaciones sociales que constituyen nuestra identidad. Y al preguntarnos quiénes deciden el qué, cómo y para qué, de aquello a ser conservado como patrimonio, somos agentes activos en la construcción social de nuestro presente. Quizás así podremos vernos también a nosotros mismos como parte de lo que hay detrás del cristal y recuperar como sociedad la capacidad de horrorizarnos por el genocidio del que este libro da cuenta.
Dr. Walter Delrio.